Se jugaba el cuarto set del duelo de Octavos de Final del Australian Open entre Daniil Medvedev y Maxime Cressy, dos jugadores con estilos de juego completamente diferentes: El ruso, un contragolpeador neto, ante la vieja escuela del estadounidense, que está liderando un 'renacer' del tenis de saque y red desde su aparición en el US Open 2020.
En un largo tercer game, en un deuce, Medvedev mandó ancha una devolución de derecha cuando Cressy subía a la red por enésima ocasión. Al caminar hacia el lado de las ventajas, el europeo gritó a todo pulmón: "¡Esto es tan aburrido!", en alusión al juego del norteamericano, que buscaba acortar los puntos cada vez que servía, además que consideraba que el tiempo que tomaba el estadounidense entre puntos era excesivo.
Finalmente, el número dos del mundo acabó llevándose la victoria por 6-2 7-6 6-7 y 7-5 para acceder a Cuartos de Final y quedar a tres victorias de convertirse en número uno del orbe. Post partido, fue consultado en rueda de prensa acerca de su reacción, a lo que señaló que "Estaba bastante enojado hoy porque pasaron un par de cosas, pero de todos modos logré ganar. Pude mantener mi calma lo más que pude, porque a veces me vuelvo incluso más loco. No me sentí bien por un par de razones; en primer lugar, no sé que tengo que hacer para jugar en la cancha central en los Grand Slams. Ya gané el último, soy el mayor cabeza de serie aquí. Jugar contra Maxime hubiese sido más fácil en la Rod Laver, donde hay más espacio".
Medvedev también se molestó porque utilizó el break entre el tercer y cuarto set para cambiarse bajo el tiempo presupuestado entre sets, que son 90 segundos, en vez de solicitar un periodo más extenso, y al haber ido a cambiarse de ropa, el árbitro francés Renaud Lichtenstein contó aquel descanso como un break para ir al baño, que dura entre tres a cinco minutos. Medvedev indicó que esto había detonado aquel comentario durante el cuarto parcial: "La regla dice que si usaste todos tus breaks, aún puedes ir a orinar, en el tiempo disponible entre los cambios de lado o lo que sea. Le pregunté al árbitro y al supervisor si podía correr al baño en el tiempo entre sets, cambiarme y aún tener disponible el break en el caso de que haya un quinto set, porque hay 35 grados de calor y me dijeron que tenía que contar. Yo quería hacerlo en un minuto y medio. Esas son tonteras. Me enojé mucho y lo que pasó después fue una consecuencia, y le pido disculpas a Maxime por ello. Estuve muy molesto durante el día".
Foto: Michael Errey / Getty Images