En diciembre se supo la programación de las series de Copa Davis correspondientes a los Grupos Mundiales I y II. Las federaciones tenían dos alternativas para albergar las series pospuestas debido a la pandemia: En marzo o septiembre de este año. Eslovaquia, rival de Chile en el Grupo I, decidió disputar la serie entre el 5 y 6 de marzo en Bratislava, sobre cancha dura bajo techo.
La Federación de Tenis de Chile solicitó suspender la serie y postergarla para septiembre: "La ITF nos preguntó cuándo preferíamos jugar y nosotros dijimos que en septiembre. Luego, le preguntaron lo mismo a Eslovaquia y ellos dijeron que en marzo. Entonces, le escribí a la ITF diciéndoles que para qué nos preguntaban si al final iban a decir lo contrario. Ahí me respondieron que en estos casos pesa la preferencia del local", comentó el presidente de la Fetech, Sergio Elías, en diálogo con La Tercera.
Una de las razones de la preocupación del equipo chileno es debido al rebrote de COVID-19 en el país europeo. A causa de la situación, todas las actividades tenísticas en Eslovaquia están suspendidas hasta al menos el 24 de enero.
Elías se comunicó con su par eslovaco, Tibor Macko, para ver la posibilidad de suspender la serie: "A la ITF le dije que me parecía poco práctico y que se estaba perdiendo el fair play. Así que como última opción, le escribí al presidente de la Federación de Tenis de Eslovaquia para explicarle nuestra preocupación y que visibilicen la posibilidad de postergar, tomando en consideración que la proporción de casos con la población del país es bastante mayor. Estamos a la espera de esa respuesta", declara.
Otro de los motivos de la solicitud es netamente deportivo: La fecha choca con el ATP 250 de Santiago, cuya Qualy arranca ese mismo fin de semana. Ya Nicolás Jarry comprometió su presencia en el torneo que organiza su familia, mientras que la organización cuenta con Cristian Garin, primer sembrado en la edición pasada, como su principal atractivo.