“La programación es una mierda”. Así empezó la participación de Benoit Paire en el Masters 1000 de Roma, donde debía enfrentar este lunes frente al local Jannik Sinner. En su cuenta de Twitter, se descargó contra la organización del torneo, que lo programó para esta jornada pese a todos los inconvenientes que tuvo para salir de Nueva York luego de haber dado positivo por COVID-19 y haber estado en cuarentena hasta el viernes.
En el partido, Paire jamás se sintió cómodo. El joven talento italiano no tuvo inconvenientes para despacharlo por 6-2 y 6-1, aunque el volátil genio del francés ayudó bastante. En el inicio del partido mandó lejos su raqueta dos veces, y después pidió trainer en mitad de un game en el segundo set, a lo que el juez de silla se negó. Paire le respondió: “Antes no lo estaba, pero ahora sí estoy lesionado”. Posteriormente lanzó una botella de agua dentro de la cancha, y al momento de que el árbitro pidió que la retirara, la azotó contra los avisos publicitarios tras golpearla con su raqueta.
Al cambio de lado posterior, ganó un punto tras sacar por abajo y luego intentó servir cuando Sinner estaba recién tomando posición para devolver, a lo que volvió a discutir con el juez. Locura total.
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