El histórico ex tenista alemán, Boris Becker, otrora número uno del mundo y campeón de seis títulos de Grand Slam, arriesga hasta siete años de cárcel luego de afrontar un juicio por ocultamiento de bienes en bancarrota, la cual declaró en 2017.
El germano se encuentra acusado de ocultar, entre otros bienes, sus trofeos de Wimbledon y el Australian Open, su medalla de Oro olímpica obtenida en Barcelona 1992, propiedades, y un monto de dinero que se aproxima a los dos millones de libras esterlinas, según señaló la agencia AFP. Cuando Becker se declaró en quiebra cinco años atrás, las deudas llegaban a un estimado de 50 millones de la divisa británica.
En el juicio preliminar en el Tribunal de la Corona de Southwark, en Londres, 'Boom Boom' fue acusado de poseer un departamento en el barrio de Chelsea en la capital inglesa, avaluado en alrededor de cinco millones de libras, además de otras dos propiedades en Alemania, no declaradas al momento de anunciarse en bancarrota. También, se denunció que el oriundo de Leimen transfirió cientos de miles de libras a las cuentas bancarias de su ex esposa, Barbara Becker, y su actual mujer, Sharlely Becker, de la cual está separado.
Anteriormente, Becker, de 54 años, solicitó a un banco un préstamo de 3,5 millones de libras esterlinas, el cual no pagó. A pesar de la quiebra, el alemán y su actual pareja, han vivido una vida de lujo a pesar de su situación económica. Durante su carrera como profesional, entre prize money y contratos de auspicio, el Daily Mail señala que ganó alrededor de 100 millones de libras, las cuales ha despilfarrado debido a su extravagante estilo de vida, gastando millones en obras de arte, autos deportivos y propiedades.
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