Este lunes, Cristian Garin comunicó el final de su vínculo con el coach español Pepe Vendrell, el cual duró alrededor de cinco meses, en lo que fue su tercer cambio de entrenador en un año. El castellonense, atendió a Séptimo Game para analizar lo que fue el tiempo de trabajo con el nacional, mostrándose agradecido por la oportunidad de trabajar con el chileno..
¿Cómo evalúas este tiempo con Cristian? Entendiendo que venía en un mal momento, y pudo recuperar la confianza tanto en la cancha como fuera de ella...
Ha sido un experiencia positiva. Me gusta ser agradecido, a pesar de que terminar tan pronto no entraba en mis planes, pero la experiencia junto a 'Cris' ha sido muy intensa desde el minuto 1. Creo que los dos nos llevábamos cosas que nos ayudarán en el futuro.
¿Te sorprendió la decisión que tomó de no continuar con el proceso?
En parte sí. Creo que estábamos en un momento que podía ser una oportunidad para reforzar el proyecto, para consolidar nuestra relación después de meses muy intensos, y que habían puesto las bases para darle continuidad al trabajo que empezamos en marzo.
¿De qué manera te informa Cristian de su postura, y continuar por diferentes caminos?
Quedamos para tener una charla después del US Open, conversamos y me comentó su idea de poner fin a la relación: Sentía que la relación se había desgastado por la intensidad del día a día y que prefería elegir otro camino diferente.
¿Sientes que aún quedaba camino por recorrer juntos?
Sí, claro. Como te he dicho, tengo la sensación de que era un momento para reforzar el trabajo que se empezó a hacer. Además, creo que a los dos nos hubiera venido de maravilla dar un paso adelante, darnos confianza mutua y apostar todo al equipo que tiene, que creo que cuesta mucho de encontrar, de arrancar. Al final volver a empezar, volver a arrancar, es algo que le ha ocurrido en el pasado, y que podía ser un paso importante en su evolución.
Luego de Wimbledon, las caídas en los estrenos en la mini gira de arcilla, más la lesión en la muñeca, fueron situaciones adversas para el equipo. ¿Sentiste que a partir de allí comenzó el quiebre entre ustedes?
Sí, está claro que esa parte no fue fácil pero ahí es donde se ve la fortaleza y la unión del equipo. Todas las relaciones pasan por momentos de tensión, de desgaste, pero siento que ahí es donde uno pone a prueba de verdad la solidez del proyecto, y ahí creo que nos faltó lograr más continuidad y seguir adelante, lo que podía ser un buen punto de inflexión, y no supimos lograrlo.
¿Con qué sensación te quedas tras el final del vínculo con Cristian?
La sensación es de habernos quedado a medio camino. Nos ha faltado el segundo tiempo, y darle continuidad a lo que habíamos construido. La estabilidad se logra superando momentos y como te digo, creo que era lo que tocaba, juntarse, apostar por el grupo y evitar hacer cambios. Al final, eso es volver a empezar, y siempre cuesta de nuevo.
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