Al grupo de jugadores que estuvo en contacto con Benoit Paire, positivo por COVID-19, se le ha denominado como el “Paire’s Eleven”, y el francés Adrian Mannarino forma parte. El zurdo, debido a su protocolo especial, solo tenía permitido ingresar a entrenar, permanecer por un momento en su suite que se le asignó como sembrado, jugar, e irse a su cuarentena, donde tiene que permanecer hasta el 11 de septiembre. Sin embargo, antes de su duelo de tercera ronda ante Alexander Zverev, el duelo fue retrasado misteriosamente por dos horas y media. A medida de que pasaba el tiempo se esclareció la razón: El Gobierno de Nueva York le prohibió a Mannarino salir a la cancha debido a que se encontraba en cuarentena.
Durante esas horas, la USTA y ATP intercedieron por Mannarino para que pudiera jugar, y compitió de la mejor manera. Pese a ello, el galo cayó por 6-7 6-4 6-2 y 6-2 frente al quinto preclasificado del torneo. Pese a ello, Mannarino se mostró feliz de haber tenido la oportunidad de competir en la Louis Armstrong.
El francés detalló cómo fue la situación en rueda de prensa: “Me estaba preparando para jugar, no antes de las 14:30. Solo quería estar listo, y calentaba con mi entrenador. El Tour Manager vino a hablar conmigo y me explicó la situación. El Departamento de Salud del estado de Nueva York tomó cartas sobre el asunto por sobre la ciudad, que me había permitido jugar bajo un nuevo protocolo. El Estado dijo que como había estado expuesto a un caso positivo, debería estar en cuarentena en mi habitación y no podía salir a jugar hoy“.
“Ellos me dijeron que que estaban tratando de contactar a alguien por teléfono para ver si esta decisión podía ser cambiada. Obviamente, se hizo un gran esfuerzo. Me dijeron que habían decidido posponer el partido para las 5 pm. Sascha (Zverev) estuvo de acuerdo, lo cual fue muy bueno. Iban a revisar la situación, ver si me podían colocar en cancha hoy, lo cual cumplieron”, agregó.
“Muchas cosas pudieron haber sucedido durante ese tiempo, mientras yo solo intentaba prepararme. Me dije a mí mismo que tenía que estar listo para entrar a la cancha a las 5. Le dije a mi entrenador que si algo pasaba, le daba mi teléfono, solo para ver qué es lo que sucedía, y que él manejara todo esto”, añade.
Finalmente, agradeció a aquellos que le permitieron competir en la jornada de viernes: “Solo quiero darles las gracias a todas esas personas que han estado intentando que yo pudiera estar en la cancha hoy. Como dije, muchos esfuerzos se hicieron. Yo pude jugar mi partido de tenis y estoy muy feliz por eso“.
Zverev y Djokovic empatizan con Mannarino
El verdugo de Mannarino, Alexander Zverev, solidarizó con él respecto a lo que vivió durante este viernes: “Al final, pienso qué habría pasado si yo hubiese estado en su situación. Me hubiera gustado que mi oponente o los demás jugadores que hablaran. No fue su culpa, ni del US Open, sino que había política involucrada. Quizás habría dicho que si él no podía jugar a la hora que estábamos programados, pues mala suerte, pero en mi opinión, lo correcto era esperar. Había que darle la oportunidad (a Mannarino) de jugar, porque si yo hubiese pasado por lo mismo no me hubiera gustado no poder jugar. Afortunadamente pudimos jugar y para ambos fue lo mejor“.
Novak Djokovic también tuvo palabras para lo ocurrido: “Estaba al tanto de lo que sucedía con Adrian Mannarino y fui contactado por su entrenador durante ese proceso. Me estuve comunicando con él por unas horas e intenté ayudar, hablé con ATP, intenté tener más información con los Tour Managers, y también estuve intentando llegar a quienes tienen las posiciones más altas en el Estado de Nueva York, y entiendo que el Gobernador era el único que podía revertir la decisión que lo eliminaba a Mannarino del torneo. Al final no supe lo que pasó, solo me dijeron que Adrian pudo jugar, y estuve contento de ver eso”.
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